El encuentro se realizará mañana, en la intersección de Coronel Branden y Pereyra, lugar donde se encontraba la antena que cayó el 4 de abil durante la fuerte tormenta.
Solicitan el apoyo de la comunidad y se encuentran recolectando testimonio de vecinos que padecen alguna enfermedad que podría estar vinculada a la radiación emanada por ese tipo de artefactos, que deben instalarse a una distancia mayor de 150 metros de escuelas y hospitales. 
Padres de alumnos y vecinos del Colegio Don Bosco que se oponen a la reinstalación de una antena de telefonía celular que se encontraba dentro del predio del establecimiento, convocaron a una reunión que se realizará mañana a las 17.30.
El encuentro tendrá lugar en la intersección de las calles Coronel Brandsen y Pereyra, lugar en el que hasta el 4 de abril se encontraba montada la antena. Esa noche, la misma cayó como consecuencia de la fuerte tormenta y ocasionó destrozos en el quincho del Colegio, e hirió a dos personas que estaban allí.
El objetivo de la reunión es lograr la mayor adhesión de padres de alumnos y vecinos de la zona para que se sumen al reclamo y también convocar a aquellos que padezcan o tengan conocimiento de personas que sufran enfermedades que podrían estar vinculadas con las radiaciones emitidas por la antena.
La antena fue instalada en el establecimiento en 1996, y funcionó allí hasta el 4 de abril, incumpliendo la Ordenanza Municipal N° 14.902, promulgada el 7/12/2001 en su Art. 17 dice: “no podrán instalarse antenas de emisión y/ o retransmisión ni antenas que operen a más de 800 MHZ y/ o emisoras de radio y TV, en un radio menor de 150 metros de hospitales, escuelas, sanatorios o clínicas médicas”.
Además, la negativa de los padres a la reinstalación de la entena se basa en normativas internacionales. La Organización Mundial de la Salud (O.M.S), en su artículo 16 deja expresado que en las zonas C1 y C2 se prohíbe la instalación de antenas con emisión y/o transmisión por la alta densidad de población en esas zonas.
De hecho, los perjuicios para la salud que la radiación de este tipo de artefactos produce y son considerados nocivos para la salud, ya se ha sentido en la zona, ya que se registraron casos de cáncer de distinta magnitud, cuestión que alarma enormemente a la población.
Para llegar a esa conclusión, fueron los mismos padres y vecinos los que realizaron un relevamiento. Cuando expusieron la alarmante situación ante el representante legal del establecimiento, este manifestó a un grupo de padres, que “no comparte” dicho criterio
En ese sentido, pidieron que “que no siga perdurando el beneficio económico por sobre la salud de los niños”.
La antena pertenece a la empresa MoviStar y fue instalada en 1996, a través de un contrato de renta con los propietarios de la Institución Salesiano. A pesar de las normativas que impiden su funcionamiento en un establecimiento y las irregularidades existentes, el contrato fue renovado en 2007, por un lapso de 10 años.
Fuente: Diario NCO
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