Es del 19,7% entre las mujeres menores de 29 años.
El desempleo entre las mujeres menores de 29 años está cerca de triplicar la tasa de la población general. Para ellas llega al 19,7%, cuando para el resto de los argentinos es del 7,6%, según informó ayer el Indec.
"La mujeres sufren más el desempleo que los varones", afirmó Mercedes D'Alessandro, doctora en Economía. En las mujeres en general la tasa es del 8,4%, mientras que para ellos es del 6,9%. "Dentro de ese mundo, las chicas de hasta 29 años sufren niveles altísimos. Lo que pasa es que hay mucha discriminación, porque las empresas ven la posibilidad de reproducción y un costo asociado. Esto se soluciona dando una licencia por maternidad y paternidad de la misma duración", afirmó a LA NACION la autora del libro Economía feminista.
"Un déficit laboral estructural es la baja tasa de participación laboral de la mujer en general", estimó Jorge Colina, economista de Idesa. Mientras el 64,1% de los varones mayores de 14 años tiene empleo, sólo el 42,4% de las mujeres está en la misma situación. "Esto se explica porque desde muy joven la mujer es relegada a tareas del hogar, fenómeno del que surge que la tasa de empleo femenino en las menores de 29 años sea del 29,7%, en contraste con la tasa de 47,4% para los varones de la misma franja", dijo.
Patricia Debeljuh, del IAE, lo reafirmó. "Las que se suman al mercado no lo hacen en igualdad, ganan peores salarios y tienen menos acceso a las direcciones", cerró.
LA NACION Economía
"Un déficit laboral estructural es la baja tasa de participación laboral de la mujer en general", estimó Jorge Colina, economista de Idesa. Mientras el 64,1% de los varones mayores de 14 años tiene empleo, sólo el 42,4% de las mujeres está en la misma situación. "Esto se explica porque desde muy joven la mujer es relegada a tareas del hogar, fenómeno del que surge que la tasa de empleo femenino en las menores de 29 años sea del 29,7%, en contraste con la tasa de 47,4% para los varones de la misma franja", dijo.
Patricia Debeljuh, del IAE, lo reafirmó. "Las que se suman al mercado no lo hacen en igualdad, ganan peores salarios y tienen menos acceso a las direcciones", cerró.
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