Fuente: El Diario de Morón
Un instituto en el que se dictan cursos de autoayuda vuelve a estar en el foco de la tormenta. En los últimos días, la Defensoría del Pueblo de Morón recibió denuncias de familiares de asistentes al lugar porque se sintieron estafados.
Un instituto en el que se dictan cursos de autoayuda vuelve a estar en el foco de la tormenta. En los últimos días, la Defensoría del Pueblo de Morón recibió denuncias de familiares de asistentes al lugar porque se sintieron estafados.
Sin embargo, desde el organismo explicaron que poco y nada se puede
hacer. El establecimiento acusado de “lavar cerebros” está en frente de
la Municipalidad, en Almirante Brown al 900, y cumpliría con todas las
normas vigentes.
“Recibimos tres denuncias al respecto. El tema excede al municipio de
Morón, por lo que pude hablar con la defensora del Pueblo de La Matanza
–Silvia Caprino- allí también tienen denuncias. Es una cuestión muy
difícil de actuar porque tienen el sistema muy bien elaborado”, explicó a
El diario Abraham Gak, el titular de Defensoría de Morón.
En ese sentido, el funcionario explicó que “se trata de adhesiones
voluntarias de las personas a una serie de cursos que les generan un
estado de dependencia que los van adaptando a nuevos cursos y a mayores
precios. Se llega al extremo de obligarles a las personas a liquidar
bienes personales para poder seguir pagando”.
Estos cursos pueden llegar a costar entre cuatro mil y ocho mil pesos
por mes, dependiendo el nivel. El defensor del Pueblo dijo que desde la
institución argumentan que “sólo instruyen a las personas y las ayudan a
vivir en su crisis. Seguramente el alumno se sienta mejor pero le
genera dependencia y desaparece la voluntad”.
Por último, Gak recomendó a aquellas personas que se consideren
víctimas a realizar las denuncias en la justicia. “Frente a la ejecución
de un pagaré, o una obligación, se podría plantear el grado de
dependencia generado que les quitan margen de negociación ya que no hay
resquicio legal para poder actuar, están inscriptos, pagan los impuestos
y se someten a todas las reglas”, concluyó.
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