Una nueva práctica entre los adolescentes alerta a padres de todo el mundo. Se trata de la exposición por un tiempo prolongado al líquido expulsado por los desodorantes sobre la piel, lo que provoca quemaduras de hasta segundo grado.
La peligrosa práctica consiste en rociar la piel con desodorante durante el mayor tiempo posible. Como consecuencia se registraron quemaduras de distinta gravedad en niños y adolescentes. Uno de los casos más difundidos es el de una adolescente inglesa de 15 años que sufrió importantes quemaduras en su piel luego del ritual.
Según detalla el sitio Univisión Noticias, el tipo de quemaduras generada por el spray puede requerir una cirugía para reparar el tejido dañado.
"No se puede echar el spray por más de tres segundos. De ser así, se generan quemaduras en la piel", indicó el cirujano Omar Torres y aclaró que ese tipo de lesiones puede dejar cicatrices permanentes.
Las quemaduras autoprovocadas pueden ser hasta de segundo grado |
Según detalla el sitio Univisión Noticias, el tipo de quemaduras generada por el spray puede requerir una cirugía para reparar el tejido dañado.
"No se puede echar el spray por más de tres segundos. De ser así, se generan quemaduras en la piel", indicó el cirujano Omar Torres y aclaró que ese tipo de lesiones puede dejar cicatrices permanentes.
Fuente: La Nación
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