La Sociedad Argentina de Cardiología te explica cuáles son los principales enemigos de tu corazón y cómo prevenir que se enferme.
Las enfermedades cardiovasculares son un grupo de desórdenes del corazón y los vasos sanguíneos que anualmente provocan el fallecimiento de 17 millones de personas. La mayoría de dichas patologías podrían prevenirse simplemente modificando hábitos de vida y actuando sobre factores de riesgo, pero ¿cuáles son los principales enemigos del corazón?
HIPERTENSION
En la Argentina, una de cada tres personas es hipertensa y el 37% de la población lo desconoce, según demostró el estudio RENATA realizado por la Sociedad Argentina de Cardiología (SAC). La hipertensión puede ser asintomática o bien generar síntomas como dolor de cabeza, vértigo, dificultad para respirar y palpitaciones.
Está ampliamente difundido que el consumo de sal se relaciona en forma directa con la hipertensión arterial, por lo cual la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que el consumo máximo sea de 5 gramos. Sin embargo, en nuestro país la ingesta de sal diaria es más del doble de lo recomendado, según datos del Ministerio de Salud de la Nación.
Si se redujera el consumo de sal al nivel recomendado por la OMS, se podría evitar hasta 1 de cada 4 ataques al corazón o accidentes cerebro vasculares.
MALA ALIMENTACION
Una correcta nutrición se logra con hábitos tan simples como por ejemplo el control de los ingredientes en las etiquetas de los alimentos y bebidas a consumir.
Se debe reducir el consumo aquellos alimentos con alto porcentaje de grasas, sobre todo las saturadas. También se deben evitar aquellos con elevadas cantidades de sodio.
Por ejemplo, tres medialunas tienen toda la cantidad de sal que una persona con hipertensión arterial puede consumir en una semana. Incluso el agua tiene sodio.
Existen dentro de las aguas embotelladas dos grupos: las que tienen alto y bajo contenido de sodio. Si nos remitimos a los dos litros que son recomendados incorporar por día para lograr una hidratación adecuada, es importante destacar que el aporte de las aguas de alto contenido de sodio para dicho consumo es de 256 miligramos por día, mientras que el de las bajas en sodio, es de 20 miligramos por día.
OBESIDAD
El sobrepeso y la obesidad constituyen un importante factor de riesgo para las enfermedades cardiovasculares como el accidente cerebro vascular (ACV), la enfermedad coronaria y otras patologías como la diabetes tipo 2 y diferentes enfermedades crónicas.
Según la OMS, actualmente en el mundo hay más de 1000 millones de personas con sobrepeso, mientras que la Tercera Encuesta Nacional de Factores de Riesgo del Ministerio de Salud de la Nación, realizada en 2013, refleja que 6 de cada 10 personas tienen exceso de peso y 2 de cada 10 sufren de obesidad.
Estos valores alarmantes se deben a hábitos de vida como el consumo excesivo de calorías, grasas saturadas, sal y azúcares, sumado al sedentarismo.
SEDENTARISMO
Según la OMS, la inactividad física es la cuarta causa de muerte por enfermedades no trasmisibles en todo el mundo y contribuye a provocar más de tres millones de muertes evitables cada año. Este organismo, también expresó que al menos un 60% de la población mundial no realiza la actividad física necesaria para obtener beneficios para la salud.
El sedentarismo se relaciona directamente con la presión arterial elevada, el aumento de los niveles de colesterol y glucosa y la obesidad. Lo recomendable es realizar actividad física regularmente, como podría ser una caminata, al menos 30 minutos por día, fomentando con esta práctica una conducta saludable.
BUENOS CONSEJOS
Entre las principales medidas para cuidar la salud cardiovascular, la SAC menciona:
Fuente: Doctor Vid
Las enfermedades cardiovasculares son un grupo de desórdenes del corazón y los vasos sanguíneos que anualmente provocan el fallecimiento de 17 millones de personas. La mayoría de dichas patologías podrían prevenirse simplemente modificando hábitos de vida y actuando sobre factores de riesgo, pero ¿cuáles son los principales enemigos del corazón?
HIPERTENSION
En la Argentina, una de cada tres personas es hipertensa y el 37% de la población lo desconoce, según demostró el estudio RENATA realizado por la Sociedad Argentina de Cardiología (SAC). La hipertensión puede ser asintomática o bien generar síntomas como dolor de cabeza, vértigo, dificultad para respirar y palpitaciones.
Está ampliamente difundido que el consumo de sal se relaciona en forma directa con la hipertensión arterial, por lo cual la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que el consumo máximo sea de 5 gramos. Sin embargo, en nuestro país la ingesta de sal diaria es más del doble de lo recomendado, según datos del Ministerio de Salud de la Nación.
Si se redujera el consumo de sal al nivel recomendado por la OMS, se podría evitar hasta 1 de cada 4 ataques al corazón o accidentes cerebro vasculares.
MALA ALIMENTACION
Una correcta nutrición se logra con hábitos tan simples como por ejemplo el control de los ingredientes en las etiquetas de los alimentos y bebidas a consumir.
Se debe reducir el consumo aquellos alimentos con alto porcentaje de grasas, sobre todo las saturadas. También se deben evitar aquellos con elevadas cantidades de sodio.
Por ejemplo, tres medialunas tienen toda la cantidad de sal que una persona con hipertensión arterial puede consumir en una semana. Incluso el agua tiene sodio.
Existen dentro de las aguas embotelladas dos grupos: las que tienen alto y bajo contenido de sodio. Si nos remitimos a los dos litros que son recomendados incorporar por día para lograr una hidratación adecuada, es importante destacar que el aporte de las aguas de alto contenido de sodio para dicho consumo es de 256 miligramos por día, mientras que el de las bajas en sodio, es de 20 miligramos por día.
OBESIDAD
El sobrepeso y la obesidad constituyen un importante factor de riesgo para las enfermedades cardiovasculares como el accidente cerebro vascular (ACV), la enfermedad coronaria y otras patologías como la diabetes tipo 2 y diferentes enfermedades crónicas.
Según la OMS, actualmente en el mundo hay más de 1000 millones de personas con sobrepeso, mientras que la Tercera Encuesta Nacional de Factores de Riesgo del Ministerio de Salud de la Nación, realizada en 2013, refleja que 6 de cada 10 personas tienen exceso de peso y 2 de cada 10 sufren de obesidad.
Estos valores alarmantes se deben a hábitos de vida como el consumo excesivo de calorías, grasas saturadas, sal y azúcares, sumado al sedentarismo.
SEDENTARISMO
Según la OMS, la inactividad física es la cuarta causa de muerte por enfermedades no trasmisibles en todo el mundo y contribuye a provocar más de tres millones de muertes evitables cada año. Este organismo, también expresó que al menos un 60% de la población mundial no realiza la actividad física necesaria para obtener beneficios para la salud.
El sedentarismo se relaciona directamente con la presión arterial elevada, el aumento de los niveles de colesterol y glucosa y la obesidad. Lo recomendable es realizar actividad física regularmente, como podría ser una caminata, al menos 30 minutos por día, fomentando con esta práctica una conducta saludable.
BUENOS CONSEJOS
Entre las principales medidas para cuidar la salud cardiovascular, la SAC menciona:
- Mantener un peso saludable
- Reducir el consumo de alcohol
- Evitar los alimentos y bebidas con alto contenido de sodio
- Eliminar la ingesta de grasas saturadas
- Realizar al menos 30 minutos de actividad física por día
- Incorporar a la dieta diaria el consumo de verduras y frutas
- Abandonar el consumo de cigarrillo
- Realizar chequeos médicos anuales
Fuente: Doctor Vid
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