El primer juicio por jurados,en San Martín,el segundo en Mayo en Morón
Con más dudas que certezas empezaron los juicios por jurados en la Provincia de Buenos Aires. Temores, desconocimiento y medios de comunicación ya son parte de la toma de decisiones.
Los juicios por jurados en Morón son un hecho. Durante los primeros días de mayo el Tribunal Oral Criminal 5 establecerá una condena de acuerdo al veredicto que 6 mujeres y 6 hombres dictarán veredicto sobre un robo agravado con homicidio agravado.
Todos los delitos con penas mayores a 15 años, contra la integridad sexual o a funcionarios públicos deberán someterse a juicio por jurados. Esta modalidad, tomada de la tradición anglosajona y que forma parte de la constitución de Estados Unidos, no forma parte de la “tradición” jurídica argentina, por lo que jueces, fiscales, defensores y acusados deberán aprender una nueva manera de juzgar.
La preselección de los posibles jurados se realizó por sorteo durante mayo de 2014, entre ciudadanos de 21 a 75 años. Para cada juicio se convocarán 48 personas, de entre quienes el juez a cargo de la causa seleccionará 6 mujeres, 6 hombres y 6 suplentes. Este criterio de selección es totalmente personal de cada magistrado.
Los tecnicismos legales, hasta ahora solo comprensibles solo para quienes ejercen el derecho, pasarán a segundo plano. Ciudadanos comunes tendrán que juzgar a ciudadanos comunes. Según el juez Carlos Torti “va a depender de la habilidad de los fiscales y defensores porque es un jurado que va a estar influenciado no por las cuestiones legales sino como les explican los hechos. Esto se denomina teoría del caso para el derecho norteamericano.
Y también va a depender de la influencia de los medios de comunicación para cada uno de los casos.”. El magistrado estima que no más del 2 por ciento de los casos llegarán a estos juicios, ya que por expresa renuncia del imputado o por juicio abreviado –en la que fiscal, defensor y acusado resumen el proceso- la mayoría de los casos se resolverá.
“La carga emocional va a estar presente” agregó, “son jurados legos (explicar un tema técnico usando palabras que el individuo promedio pueda comprender), donde los primordial es la íntima convicción”.
Además, esta nueva manera de administrar justicia se enfrenta a su primer gran escollo. La infraestructura edilicia de los tribunales la provincia de Buenos Aires no está preparada para sumar 18 ciudadanos más en la sala oral como tampoco están aún previstos los espacios para que el jurado delibere a puertas cerradas, teniendo en cuenta que el proceso debe desarrollarse de manera ininterrumpida desde el inicio hasta el veredicto.
Según fuentes judiciales hay una opinión mayoritaria en el ámbito judicial de que no tendrá buenos resultados ya que hay aspectos que solo pueden ser abordados por un juez profesional. Y, aseguran, a pesar de que la Constitución Nacional de 1853 fijó el juicio por jurados, se instrumenta ahora no por un reclamo social sino por la coyuntura política y la calificación eleccionaria de democratización judicial.
Fuente: Diario Latitud
Los juicios por jurados en Morón son un hecho. Durante los primeros días de mayo el Tribunal Oral Criminal 5 establecerá una condena de acuerdo al veredicto que 6 mujeres y 6 hombres dictarán veredicto sobre un robo agravado con homicidio agravado.
Todos los delitos con penas mayores a 15 años, contra la integridad sexual o a funcionarios públicos deberán someterse a juicio por jurados. Esta modalidad, tomada de la tradición anglosajona y que forma parte de la constitución de Estados Unidos, no forma parte de la “tradición” jurídica argentina, por lo que jueces, fiscales, defensores y acusados deberán aprender una nueva manera de juzgar.
La preselección de los posibles jurados se realizó por sorteo durante mayo de 2014, entre ciudadanos de 21 a 75 años. Para cada juicio se convocarán 48 personas, de entre quienes el juez a cargo de la causa seleccionará 6 mujeres, 6 hombres y 6 suplentes. Este criterio de selección es totalmente personal de cada magistrado.
Los tecnicismos legales, hasta ahora solo comprensibles solo para quienes ejercen el derecho, pasarán a segundo plano. Ciudadanos comunes tendrán que juzgar a ciudadanos comunes. Según el juez Carlos Torti “va a depender de la habilidad de los fiscales y defensores porque es un jurado que va a estar influenciado no por las cuestiones legales sino como les explican los hechos. Esto se denomina teoría del caso para el derecho norteamericano.
Y también va a depender de la influencia de los medios de comunicación para cada uno de los casos.”. El magistrado estima que no más del 2 por ciento de los casos llegarán a estos juicios, ya que por expresa renuncia del imputado o por juicio abreviado –en la que fiscal, defensor y acusado resumen el proceso- la mayoría de los casos se resolverá.
“La carga emocional va a estar presente” agregó, “son jurados legos (explicar un tema técnico usando palabras que el individuo promedio pueda comprender), donde los primordial es la íntima convicción”.
Además, esta nueva manera de administrar justicia se enfrenta a su primer gran escollo. La infraestructura edilicia de los tribunales la provincia de Buenos Aires no está preparada para sumar 18 ciudadanos más en la sala oral como tampoco están aún previstos los espacios para que el jurado delibere a puertas cerradas, teniendo en cuenta que el proceso debe desarrollarse de manera ininterrumpida desde el inicio hasta el veredicto.
Según fuentes judiciales hay una opinión mayoritaria en el ámbito judicial de que no tendrá buenos resultados ya que hay aspectos que solo pueden ser abordados por un juez profesional. Y, aseguran, a pesar de que la Constitución Nacional de 1853 fijó el juicio por jurados, se instrumenta ahora no por un reclamo social sino por la coyuntura política y la calificación eleccionaria de democratización judicial.
Fuente: Diario Latitud
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