La ascendente carrera de un joven sencillo
Impecable. Así, con un solo adjetivo puede definirse la carrera de Gabriel Copola de Ituzaingó que ya tiene siete medallas en Parapanamericanos en Tenis de mesa, fue participante de los Juegos Olímpicos de Londres en el 2012 y elegido dos veces por los entrenadores y organizadores del Torneo Parapanamericano de Costa Rica como el Mejor Jugador de América 2013.
Gabriel Copola es jugador de tenis de mesa adaptado, en el 2013 también obtuvo la medalla de oro en el abierto de Eslovaquia y la de bronce en Alemania, además resultó ser el número 10 del mundo. Su preparador físico es Diego Bidarty su nutricionista es Luz Espinozo que lo tienen diez puntos para poder rendir. Hoy con 30 años subió como meteoro nueve puestos en 2013 y es el octavo del ránking mundial. Actualmente trabaja como profesor en la Universidad Nacional de La Matanza y en el Servicio Penitenciario de San Martín.
Gabriel fue miembro de la delegación argentina en los Juegos Paralímpicos de Londres 2012, campeón Parapanamericano en Guadalajara en el 2011 en equipos clase 4 y 5, el mejor jugador de Tenis de Mesa adaptado de América en Paranpanamericano sub -21 en Barquisimeto en Venezuela en el 2005, Tetra Campeón argentino entre el 2008 y el 2011. Todos los títulos, todos son grandes logros que completan la carrera de un joven sencillo al que la vida puso a prueba.
En una entrevista a la revista especializada en deporte adaptado Para-argentina confesó estar sorprendido por resultados tan positivos, como haber eliminado al sexto del mundo, contó que entrena un mínimo de tres horas cada día y que cuando llega al viernes está cansado por tanto trabajo. Tal vez ni siquiera él tenga conciencia de su propia fuerza y de lo importante de sus logros.
Cuando tenía once años una subida fallida en la bici lo llevó a tener que desplazarse en silla de ruedas. Según él ha relatado, su padre le mostró la silla y supo que debería adaptarse a ella y a partir de allí comenzó a desplegar una fuerza oculta que se trasluce en su actitud frente a un problema que no lo derrotó jamás, aún cuando las cosas fueran difíciles.
A Gabriel siempre le gustaron los deportes y fue el tenis de mesa el que comenzó a practicar con más asiduidad. Para 1996 el living de Susana Giménez fue el escenario del que participaron varios jugadores paralímpicos que habían competido en Atlanta. Gabriel pidió entonces que lo llevaran a jugar y así participó de unas olimpíadas especiales organizadas en el CENARD por la Asociación para Espina Bífida e Hidrocefalia (APEBI), al tiempo comenzó a concurrir a CEDIMA y en pocos meses ya había ido a competir a México en Guadalajara.
Desde allí su carrera no paró. Tres medallas doradas en Parapanamericanos, una 2009 y dos en 2011, y cuatro de plata en el 2001, 2003 y dos en 2005 dan cuenta de ello. Gabriel se esforzó muchísimo y contó con el apoyo de toda su familia y de su papá Miguel Ángel que era el encargado de acompañarlo y trasladarlo para entrenar y competir.
Después de hacer algunos cursos de computación, finalmente encontró su futuro en la licenciatura en Educación Física en la Universidad Nacional de La Matanza. Actualmente es licenciado y profesor de la cátedra de “Introducción a la educación física especial”. Recibe una beca del Ente de Alto Rendimiento Deportivo (ENARD) que le ayuda en mucho, pero a la que siempre asegura que renunciaría si pudiera alguna vez prescindir de ella.
Gabriel Copola es un espíritu inquieto y luchador, que con su tenacidad y esfuerzo va forjando cada meta y logra cumplirla. Aunque parezca una paradoja, siempre está en movimiento, ya sea entrenando, aún con cuarenta grados de calor, practicando con sus alumnos, disfrutando de un asado con amigos o haciendo lo que le gusta cada día y a lo que se entrega con pasión.
A la vez el deportista es un gran referente para los chicos que atraviesan una situación similar a la suya y deben manejarse en silla de ruedas y siempre hace hincapié en que lo importante es la contención y el hecho de compartir y no los resultados obtenidos. La asociación ALENA de Morón es el espacio apropiado para que los jóvenes puedan realizar una práctica con estos principios. en este sentido Gabriel siempre agradece a toda su familia y amigos, a todos los que lo acompañan en su quehacer día a día.
En el 2014 se disputará en China el Mundial de Tenis Adaptado y allí irá Gaby, con el fin de arribar a nuevos sueños, diferentes metas que nos harán admirarlo cada día más. y ver en su figura el ejemplo que muchos chicos a los que la vida pone a prueba con diferentes circunstancias, podrán seguir e imitar.
Fuente: Periódico La Barra
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