Las autoridades municipales de La Matanza han presentado un proyecto para la construcción en Ramos Mejía de un estacionamiento subterráneo en dos plantas que se ubicaría por debajo de la Av. de Mayo entre Belgrano y Rosales.
El objetivo es tratar de aliviar la fuerte carga de autos estacionados en el centro de la localidad, uno de los factores que más inciden en las cotidianas complicaciones que se presentan en el tránsito.
De acuerdo a la información que ha circulado ya se habría avanzado inclusive con el proceso licitatorio de las obras las que, de acuerdo a lo planificado, no deberían demorar en su ejecución un plazo mayor a los 18 meses.
El estacionamiento tendría capacidad para 396 vehículos. Los accesos se ubicarían en la parte central de la Av. de Mayo que volvería a tener en esa zona un boulevard en el medio como lo tuviera en el pasado y muchos vecinos recordarán. También implicará una modificación de las veredas que pasarían de los actuales 5.30m a 7.40m.
El proyecto aún poco conocido por el conjunto de los vecinos no ha generado todavía una opinión de la comunidad en general salvo del sector de los comerciantes, en particular los de la zona involucrada, quienes por diversos motivos se oponen fuertemente a que este proyecto se concrete.
Ante todo no confían en que efectivamente esté finalizado en 18 meses y estiman que es muy probable que el plazo de ejecución se extienda al doble como ha sucedido en infinidad de casos, como por ejemplo los trabajos que se vienen realizando para construir el reservorio en el Ateneo Don Bosco los que han excedido largamente los plazos previstos. Quienes tienen un comercio consideran que mientras duren los trabajos disminuirá significativamente el público en sus locales lo que implicará un perjuicio económico casi imposible de sostener durante un período tan prolongado por lo que el centro comercial de Ramos Mejía quedaría seriamente afectado.
Por otro lado consideran que la cantidad de cocheras previstas, 396, es un número exiguo que no va a solucionar de ninguna manera el problema del estacionamiento y por ende no se justifica semejante obra en pos de tan pocos resultados.
Señalan además que hay soluciones alternativas menos conflictivas y más sencillas. Una, si se quiere concretar un estacionamiento subterráneo, se lo puede construir debajo de la plaza Mitre. La otra es otorgar los permisos necesarios y los incentivos para que se construyan estacionamientos particulares de varias plantas. Cuatro o cinco estacionamientos importantes equivaldrían en capacidad a la mega obra proyectada bajo la Av. de Mayo.
El proyecto está presentado, la polémica está planteada, el grave problema del tránsito del que el estacionamiento es uno de sus principales ingredientes sigue vigente y a la espera de alguna solución.
De acuerdo a la información que ha circulado ya se habría avanzado inclusive con el proceso licitatorio de las obras las que, de acuerdo a lo planificado, no deberían demorar en su ejecución un plazo mayor a los 18 meses.
El estacionamiento tendría capacidad para 396 vehículos. Los accesos se ubicarían en la parte central de la Av. de Mayo que volvería a tener en esa zona un boulevard en el medio como lo tuviera en el pasado y muchos vecinos recordarán. También implicará una modificación de las veredas que pasarían de los actuales 5.30m a 7.40m.
El proyecto aún poco conocido por el conjunto de los vecinos no ha generado todavía una opinión de la comunidad en general salvo del sector de los comerciantes, en particular los de la zona involucrada, quienes por diversos motivos se oponen fuertemente a que este proyecto se concrete.
Ante todo no confían en que efectivamente esté finalizado en 18 meses y estiman que es muy probable que el plazo de ejecución se extienda al doble como ha sucedido en infinidad de casos, como por ejemplo los trabajos que se vienen realizando para construir el reservorio en el Ateneo Don Bosco los que han excedido largamente los plazos previstos. Quienes tienen un comercio consideran que mientras duren los trabajos disminuirá significativamente el público en sus locales lo que implicará un perjuicio económico casi imposible de sostener durante un período tan prolongado por lo que el centro comercial de Ramos Mejía quedaría seriamente afectado.
Por otro lado consideran que la cantidad de cocheras previstas, 396, es un número exiguo que no va a solucionar de ninguna manera el problema del estacionamiento y por ende no se justifica semejante obra en pos de tan pocos resultados.
Señalan además que hay soluciones alternativas menos conflictivas y más sencillas. Una, si se quiere concretar un estacionamiento subterráneo, se lo puede construir debajo de la plaza Mitre. La otra es otorgar los permisos necesarios y los incentivos para que se construyan estacionamientos particulares de varias plantas. Cuatro o cinco estacionamientos importantes equivaldrían en capacidad a la mega obra proyectada bajo la Av. de Mayo.
El proyecto está presentado, la polémica está planteada, el grave problema del tránsito del que el estacionamiento es uno de sus principales ingredientes sigue vigente y a la espera de alguna solución.
Fuente: Periódico La Barra
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